Ventajas de elegir un colchón infantil ecológico

Decidirse entre la amplia variedad de colchones para niños que se ofrece hoy en día no es fácil. Hay varias firmezas, materiales, acabados y múltiples fabricantes. Aun así, desde Ekoideas tenemos claro que la mejor opción es escoger un colchón infantil ecológico, con certificados de calidad y libre de tóxicos.

Para demostrarlo, repasaremos los puntos clave para comprar un buen colchón: la pureza de los materiales, la franja de edad del niño o niña y la capacidad del colchón a la hora de responder a situaciones concretas como alergias, sudoración o problemas derivados del crecimiento.

De toda la oferta disponible en colchones para niños, la opción más sana siempre es la que solo incluye fibras naturales. Gracias a las propiedades del látex natural (adaptabilidad, distintas densidades, transpirabilidad) los colchones infantiles de Ekoideas son siempre sin muelles. De este modo se elimina la presencia de metales en el colchón. 

Un colchón limpio es un colchón sano. Para mantenerlo así es imprescindible disponer de un colchón con funda extraíble que permita mantener la superficie del mismo completamente saneada. Para terminar, certificar que el colchón es saludable hay que apostar por una pureza natural del 100%, escogiendo colchones con sellos de calidad que la certifiquen.

Un colchón infantil debe atender a tres cuestiones: higiene, edad y firmeza.

· Higiene: el mejor colchón infantil debe ofrecer soluciones para la sudoración o la incontinencia, siendo transpirable y disponiendo de una funda extraíble (o un cubrecolchón adicional) que mantenga el núcleo en perfectas condiciones. 

· Edad: los colchones infantiles varían en función de la edad. Los colchones de cuna (de 0 a 2 años) deben ser firmes y con funda extraíble; los colchones infantiles (de 2 a 9 años) son de transición y, por tanto, se les parecen pero tienen una mejor transpirabilidad y una mejor adaptabilidad; los colchones infantiles para adolescentes (a partir de los 10 años) acostumbran a ser más altos y no tan firmes, pudiendo utilizarse como su primer colchón para adultos.

· Firmeza: Un colchón infantil debe tener cierta firmeza para ayudar en el crecimiento y evitar problemas de espalda.

Un colchón natural está fabricado con textiles ecológicos de primera calidad como la lana y el algodón. La lana absorbe la humedad y combate la sudoración, el algodón tiene unos altos niveles de transpiración, se puede lavar y es hipoalergénico, por lo que funciona genial como funda extraíble con la que combatir las alergias y los problemas respiratorios derivados de las mismas.

En resumen, un colchón natural infantil como los de nuestro catálogo garantiza la máxima calidad, confort y seguridad en el descanso de los niños. Si tienes cualquier duda puedes ponerte en contacto con nosotros, ofrecemos asistencia personalizada para cada caso.