Látex natural, ventajas y diferencias con respecto al sintético

¿Qué es el látex natural? ¿De dónde procede? ¿Qué lo diferencia del sintético? ¿Cómo identificarlo? Para resolver estas y otras cuestiones, hemos decidido realizar un post didáctico que te permitirá conocer todas las propiedades del látex natural. Descubre por qué es uno de los materiales principales de nuestro catálogo dedicado al descanso natural.

Es un material procedente de la savia del árbol del caucho (Hevea Brasiliensis). Debido a su elasticidad y a su transpirabilidad (es ligeramente poroso y muy fácil de perforar), es especialmente útil para la fabricación de colchones y almohadas. Para que sea natural, necesita ir debidamente certificado.

Generalmente se extrae de plantaciones tropicales localizadas en el sudeste de Asia (como Tailandia, Sri Lanka o Indonesia) supervisados bajo criterios sostenibles. El látex de nuestros colchones se extrae de bosques de intervención controlada en los que se cuida el terreno utilizado para evitar la deforestación.

Si el látex cuenta con un sello de calidad internacional que certifique el origen y el porcentaje de látex natural podemos estar seguros de la calidad del mismo.

Debido a su adaptabilidad y su flexibilidad, el látex natural se amolda a cada parte del cuerpo, lo que lo convierte en un excelente material para el tratamiento de problemas de espalda, el malestar cervical o las dolencias en determinados puntos de presión (hombros o caderas). También aguanta el paso del tiempo, llegando sin problemas a los diez años, no transmite el movimiento, transpira y es hipoalergénico.

Al no incluir componentes sintéticos que reducen su densidad, el látex natural pesa más que el sintético. También es un material más difícil de encontrar, especialmente en el caso de buscar una pureza del 100%. Por último, y debido a su mayor calidad, el látex natural certificado es más caro que el sintético.   

Debido a que hablamos de un producto sin sintéticos, puede extraerse de su embalaje sin miedo a inhalar sustancias tóxicas. Por lo demás, se trata de un material que emite el olor propio del látex natural durante los primeros días, no es molesto y desaparece dejándolo transpirar durante un par de noches.

Sí. Pese a que no es un material que se deforme, es recomendable voltear los colchones cada cierto tiempo para garantizar que todas sus partes transpiran debidamente. 

No deberías tener problemas en limpiar una almohada o un colchón de látex natural. De hecho, gracias a sus propiedades antimicrobianas, no encontrarás ácaros ni bacterias presentes en otros productos para el descanso, que incluyen componentes sintéticos.

¿Es recomendable para personas con alergias?
Sí. Es un material hipoalergénico que funciona bien en personas con problemas respiratorios derivados de alergias. Recomendamos combinarlo con fundas de algodón natural extraíbles, por ser un material neutro que tampoco genera reacción y por tratarse de fundas que pueden lavarse, manteniendo la zona de descanso limpia. 

Si quieres ampliar información, te recomendamos echar un vistazo a nuestras guías de compra, con explicaciones detalladas para cada familia de productos ecológicos de nuestro catálogo, con sus materiales y su procedencia.