Cómo elegir un Colchón Natural
La mayoría de nosotros pasamos en la cama ocho horas al día, por lo que como elegir un buen colchón es una decisión importante. Para un buen descanso es recomendable que el colchón esté fabricado con productos naturales de origen ecológico y que cumpla una serie de características ortopédicas. Por eso, los colchones naturales y ecológicos son la mejor opción para nuestro descanso.
¿Qué es un colchón natural y ecológico?
Los colchones naturales y ecológicos están fabricados con productos de origen natural. En su
composición no se utilizan productos tóxicos o metales pesados y en su fabricación se ha tenido en cuenta causar el
menor perjuicio al medio natural.
Desde el punto de vista ortopédico, un buen colchón
ecológico debe adaptarse a la forma del cuerpo acostado (de lado, boca arriba o boca abajo), garantizando
que
la columna vertebral descanse de forma natural. Los colchones naturales se fabrican
principalmente con látex natural, que es extremadamente elástico y flexible, y se adapta perfectamente a
las
formas del cuerpo.
Colchones de látex natural o ecológico - Características
- Son resistentes y tienen una gran durabilidad.
- Tienen una excelente
elasticidad y se adaptan perfectamente al cuerpo.
- No contienen alérgenos, por lo que son ideales para personas alérgicas o hipersensibles.
- Están libres de sustancias químicas por lo que conservan su aroma natural.
- No
contienen metales. No emiten radiación electromagnética.
- Repelen los hongos, los ácaros y las bacterias. Son hipoalergénicos.
- Su proceso de fabricación sostenible respeta al medio ambiente.
- Permiten la creación en el núcleo del colchón de hasta 7 zonas diferenciadas.
Materiales naturales
Para conseguir una amplia gama de opciones de firmeza, transpiración, o absorción de la humedad se combina el látex natural con otros materiales naturales. Los principales materiales que se utilizan son los siguientes:
Algodón orgánico
Se utiliza fundamentalmente para las fundas,
tanto internas como externas del colchón. Se trata
de algodón orgánico proveniente de agricultura
ecológica en la que no se utilizan productos químicos ni pesticidas. Este tipo de algodón
es hipoalergénico (disminuye el riesgo de alergias).
Lana pura de oveja
Se utiliza para recubrir el núcleo del
colchón y para el relleno de las fundas externas. La lana de
oveja absorbe la humedad, guarda el calor, aísla y es elástica. La lana proviene
de ganadería ecológica controlada, certifica que los animales de los que se extrae se crían en
condiciones óptimas, su alimentación y cuidado se adapta a los criterios de responsabilidad y sostenibilidad
ambiental.
Crin de caballo
El crin de caballo es elástico y
tiene propiedades anti-reumáticas. Se utiliza principalmente para mejorar la
absorción de la humedad del colchón. Un colchón de látex ecológico envuelto en crin de
caballo mejora de forma importante la absorción del sudor durante la noche y ayuda
a regular la temperatura. Por ello, los colchones con crin de caballo están especialmente
indicados para personas que tienden a exudar mucho durante el sueño.
Beneficios de látex natural frente al sintético
Existen dos tipos de látex: el natural y el sintético. El látex natural es la savia que se extrae del árbol del caucho, el Hevea Basiliensis. Este líquido blanco y denso se obtiene haciendo un corte en la corteza del árbol. Cuando la cantidad de líquido es suficiente se mezcla con otros componentes también de origen natural y se inyecta en un molde para darle forma. Después se introduce en un horno de vulcanización, con lo que se consigue el endurecimiento por acción de la temperatura. Una vez frío se extrae del molde, se lava y se seca. El resultante es un núcleo de látex natural -de color amarillento y con aroma natural- listo para convertirse en un nuevo colchón. El látex ecológico se consigue en plantaciones tropicales, principalmente localizadas en el sudeste de Asia (Thailandia, Malasia, Vietnam, Indonesia), en África (Camerún) y en Sudamérica (Brasil).
Por su parte, el látex sintético proviene del petróleo y sus principales componentes son el butadieno y el estireno. Este tipo de látex no tiene ningún tipo de cualidad hipoalergénica y se distingue del látex natural por su color y olor, ya que, es blanco y su aroma no es natural. El látex sintético no es poroso e impide la transpiración durante el sueño.
Colchones respetuosos con el medio
ambiente
Los colchones de látex natural no sólo son agradables para descansar, sino que también son respetuosos con el medio ambiente. En comparación con los colchones de látex sintético que contienen altas concentraciones de petróleo, los colchones de origen natural aportan múltiples beneficios.
El látex natural se extrae de la hevea también conocido como árbol del caucho. Las plantaciones intensivas de este árbol frenan el efecto invernadero al transformar el CO2 en oxigeno y producen, además, madera obtenida bajo criterios de sostenibilidad y comercio justo.
La energía que se necesita para la producción de un colchón natural es un 90% inferior a la energía que se
consume en la producción de un colchón sintético. El látex natural está libre de CFC (Clorofluorocarbonos)
elemento responsable de la destrucción de la capa de ozono. Tampoco contiene disolventes o plastificantes
químicos potencialmente cancerígenos. Los colchones de látex 100% natural de los fabricante Baumberger,
Dormiente y Prolana están fabricados con el sistema Dunlop que es el único que garantiza que el
resultado final es 100% ecológico y 100% libre de sustancias químicas.
Por otro lado, los campos electromagnéticos pueden poner las defensas del cuerpo en un estado de estrés constante, esto puede causar insomnio, dolores de cabeza, tensión o sudoración excesiva. Los colchones de látex natural no tienen ningún componente metálico, son neutros electro-biológicamente, ayudando así a un descanso sano y revitalizador.
Firmeza del colchón
La firmeza de los colchones de látex natural se obtiene en función de la densidad del látex y/o los componentes con los que se combina. Los agujeros que solemos ver en los colchones de látex determinan su densidad. Así, cuanto mayor diámetro tenga el agujero y a mayor número de agujeros, menor será la cantidad de material usado por unidad volumétrica y, por lo tanto, menor la densidad del látex, es decir, más blando.
Además de la densidad del núcleo se puede obtener mayor firmeza combinándolo con otros materiales
naturales como por ejemplo la fibra de coco natural o la crin de caballo.
Los colchones naturales que encontrarás en ekoideas pueden dividirse en función del grado de firmeza en 5 categorías: desde blandos hasta firmes.
H1 / BLANDO, es blando, ejerce poca presión, recupera la forma
H2 / BLANDO-MEDIO, es confortable, se adapta al cuerpo, recupera la forma
H3 / MEDIO, es cómodo, tiene un punto de firmeza
H4 /MEDIO-FIRME, es firme
H5 / FIRME, es duro, por lo general indicado para personas de mucho peso.
Ejemplos de colchones según firmeza
Sensaciones. Encontrarás en la información de algunos modelos de colchón la opción de elegir diferentes
grados de firmeza recomendados según el peso. La información de los
pesos recomendados tiene relación con las sensaciones para cada peso. Si
un colchón es Blando H1 para personas de hasta 85 kg, una persona de más peso necesitará más firmeza para tener
la misma sensación.
Teniendo en cuenta tu peso corporal, tu forma de dormir, dolencias o incluso la edad, puedes orientarte para elegir cual es el grado de firmeza que mejor se adapta a tu situación. El objetivo no es otro que ofrecerte la mayor información para que puedas elegir el colchón natural más adecuado para dormir de la manera más cómoda y natural posible.
Zonas diferenciadas
Cuando estamos acostados en un colchón la distribución del peso de nuestro cuerpo no es uniforme a lo largo de todo el colchón, unas partes del cuerpo tienen mayor masa corporal que otras. Los colchones de látex natural con zonas diferenciadas tienen en cuenta esta variación de peso y presentan diferentes niveles de firmeza en el núcleo de látex natural para adaptarse al peso de nuestro cuerpo.
Los diferentes niveles de firmeza en el colchón se consiguen practicando orificios de diferente grosor en cada zona del colchón, cuanto mayores son los orificios mayor masa de látex extraemos del núcleo del colchón y en consecuencia este es más blando.
¿Cuál es tu forma de dormir?
A la hora de elegir un colchón es conveniente tener en cuenta cual es nuestra forma de dormir: boca abajo, boca arriba o de lado. También si nos movemos mucho o no en la cama. Además, nuestro peso condicionará la elección final del colchón. Por ejemplo, para las personas robustas es mejor un colchón de látex natural (16/18 cm) más grueso combinado también con algún material que le dé rigidez, los más indicados son la fibra de coco y el crin de caballo. Para personas de estatura media o pequeña se recomienda un colchón de 14 a 16 cm combinado con lana o algodón si se desea mayor firmeza. Aunque la decisión última es de cada uno, según sus gustos y necesidades.
Dormir de lado
La mayoría de las personas tienden a dormir de lado, la postura con la
que mejor descansa la columna. El colchón debe poder absorber el peso de los hombros y de las caderas de manera
uniforme con el objetivo de conseguir la mayor rectitud en la columna. Por eso se recomienda el uso de un
colchón elástico y suave, a poder ser con zonas de descanso independientes. Este colchón
no debería ser ni demasiado duro (se curvaría la columna vertebral y no se hundirían correctamente los hombros o
caderas), ni demasiado blando (la columna vertebral perdería tensión y se abombaría). Es recomendable un colchón
de firmeza entre blando/medio, medio o medio/firme dependiendo del peso.
Dormir boca abajo
Las personas que duermen boca abajo son minoría entre la población. No por ello deben olvidar
adquirir un colchón ortopédico que les ofrezca el mayor descanso posible. Para estas personas no es recomendable
en ningún caso un colchón blando ya que el estomago tendería a hundirse y repercutiría directamente en la
columna vertebral, causando dolor de espalda. El colchón, pues, debe ser firme y con zonas de descanso
independientes en la zona del abdomen. Si el colchón no dispone de esas zonas y es extremadamente duro puede
llegar a torcer la columna. Es recomendable un colchón de firmeza media o medio/firme dependiendo del peso.
Dormir boca arriba
Las personas que duermen boca arriba suelen
hacerlo durante toda la noche, es decir, no se mueven durante el sueño, por lo que se despiertan en la misma
posición en la que se durmieron. Para este tipo de personas es importante que la columna descanse. En este caso,
un colchón duro crearía una torcedura en la columna vertebral, y un colchón demasiado blando dejaría la columna
en un estado de flacidez, por lo que se acabaría curvando. Te recomendamos un colchón de firmeza media.
Fundas y acolchados
Un último aspecto a tener en cuenta en la elección de un colchón natural es el de las
fundas, que nos darán el toque final a nuestro colchón de látex natural. Generalmente, la funda
está elaborada con
algodón orgánico certificado (acabados satén, jersey, drill, etc) y está rellena de lana pura,
algodón, tencel (celulosa), viscosa, kapok (fibra vegetal de gran suavidad), entre otros. Los acolchados suelen
tener una densidad de entre 500g/m² y 750g/m², y son lavables a temperaturas inferiores a los 60 ºC a excepción de
la lana.
Algunos colchones pueden adquirirse con una funda de algodón orgánico sin relleno, y complementarlos con un
topper (cubre colchón externo) elaborado enteramente con materiales naturales -como el algodón o la lana-, que
suple la necesidad de la funda acolchada.
Propiedades hipoalergénicas
Los colchones de látex ecológico están especialmente indicados para personas que sufren alergias ya que tienen un riesgo casi nulo de provocar una reacción alérgica. El látex natural y el algodón orgánico son dos repelentes biológicos a los ácaros, hongos y bacterias, causantes en su mayoría de alergias u otras hipersensibilidades dermatológicas.Por otra parte, el látex ecológico y el algodón orgánico están recomendados para personas con SQM, un síndrome crónico relacionado con la exposición a productos químicos en muy bajas dosis.
Una buena base para tu colchón
También es importante que a la hora de elegir tu colchón natural tengas en cuenta la base sobre la que descansará. Es recomendable que sea una base que permita al colchón transpirar para que puedas disfrutar de todas las características de un buen colchón natural y se conserve en perfectas condiciones el máximo de tiempo posible. Si eliges un colchón de látex natural de un grosor inferior a 15 cm ten en cuenta también la rigidez del soporte. Lo más adecuado sería un somier de laminas de madera. Las laminas de madera del somier pueden ser rígidas o flexibles, ten en cuenta que un somier de láminas rígidas aportará un poco más de firmeza al conjunto de descanso.
Recomendaciones
Otro criterio a tener en cuenta a la hora de elegir la firmeza de un colchón es el peso corporal. Así para personas de hasta 65kg sería recomendable un colchón blando, para personas de 60 a 80kg un colchón blando/medio, para personas de 80 a 110kg un colchón medio, para personas de 100 a 130kg un colchón medio/firme y para personas de de más de 130kg un colchón firme.Finalmente, tenemos el caso de los niños y adolescentes. Los colchones de cuna para bebés deben ser rígidos para evitar que el recién nacido se hunda y corra el peligro de ahogarse durante el sueño. En el caso de niños mayores de 3 años y adolescentes de hasta 65 kg se recomienda un colchón medio-firme o firme para que huesos y músculos se desarrollen naturalmente durante la noche. Cada fabricante tiene su propia gama de colchones naturales para niños.
Es recomendable que, paralelamente a la elección de un colchón según su rigidez, tengas en cuenta las características propias de un buen colchón natural: ergonometría, zonas de confort, respuesta anatómica, correcta transpiración, retención de humedad, etc. Elegir mal un colchón no sólo te afectará a la hora de dormir sino que repercutirá en el propio colchón. Una persona con sobrepeso que duerma en un colchón blando o blando-medio verá como la vida útil de su colchón se reduce drásticamente.
Un colchón, por lo general, debe durar en perfectas condiciones unas 25.000 horas de sueño (de 8 a 10 años), por lo que vale la pena elegirlo correctamente.